- Sábado, 04 Noviembre 2023
- Fecha de publicación
A cargo del Presidente de PIME Catalunya (PIMEC), Antoni Cañete, en el Club Diario de Ibiza. FOTOS: Diario de Ibiza.
FUENTE: DIARIO DE IBIZA (suscripción), 4 NOVIEMBRE 2023
«Las pymes debemos contar con representación y voz propia en la mesa de diálogo social»
El presidente de la Petita i Mitjana Empresa de Catalunya apuesta por el «activismo empresarial» ante sus colegas pitiusos para contrarrestar el predominio de las grandes compañías
«Sin lugar a dudas, somos el motor de la economía en España»
Josep Àngel Costa
En España se da la paradoja de que alberga algunas de las empresas multinacionales más importantes en su sector, como el Grupo ACS, de Florentino Pérez, o el Banco de Santander, de la familia Botín, pero, sin embargo, el peso de las pequeñas y medianas empresas, así como de los autónomos, no solo es inversamente proporcional, sino que está muy lejos del que gozan en el resto de economías de la Unión Europea.
Este fue el punto de partida de la charla impartida ayer en el Club Diario de Ibiza por Antoni Cañete, presidente de la Petita i Mitjana Empresa de Catalunya (Pimec), entre otros cargos de un abultadísimo currículum. De hecho, a la hora de presentarlo, su homólogo en las Pitiusas y Balears, Alfonso Rojo, confesó que se quedaría corto aunque leyera dos páginas enteras.
Por ello, Rojo optó por resumir su trayectoria con un solo ejemplo, tan conciso como clarificador: Cañete, ingeniero electrónico industrial de formación, fue elegido uno de los 20 representantes de la comisión para la reconstrucción social y económica del Congreso de los Diputados, que tenía como objetivo la reactivación de los sectores productivos tras el parón del covid.
Con la intervención de Cañete, titulada ‘Las pymes en el puente de mando. Activismo empresarial’, la Petita i Mitjana Empresa d’Ibiza i Formentera (Pimeef) abre un ciclo de jornadas, que cuenta con la financiación del Consell de Ibiza, con el objetivo de «estar activos y reciclarse» durante la temporada baja.
Como destacó la directora insular de Promoción Económica, Pepita Costa, esta iniciativa supone una oportunidad «para conocer la voz referente de las pymes como motor de la economía y compartir inquietudes en busca de soluciones». «Las administraciones deben acompañar a las pymes y no ponerles obstáculos a su desarrollo», subrayó Costa.
Poco después, Cañete dejaba claro que la valoración de la directora insular no era ninguna hipérbole. Le bastó repasar unos pocos datos objetivos: las pymes representan el 99,8% de las empresas en España, de ellas depende el 75% de los puestos de trabajo y aportan el 75% del Producto Interior Bruto.
El agravio
«Sin género de dudas, somos el motor de nuestra economía», sentenció. Pero no lo decía con afán triunfalista, sino para poner de manifiesto el gran problema que sufre su sector y que lastra su actividad y su potencial de crecimiento. «Las pymes y los autónomos no están donde se toman las decisiones y este es un gran problema», criticó Cañete, defendiendo la labor de interlocución que debería desempeñar la confederación nacional Conpymes, que integra tanto a la Pimec como a la Pimeef.
La mesa de diálogo social de España sería el más claro ejemplo de esta marginación. Allí están las principales centrales sindicales (UGT y CCOO), así como las grandes empresas representadas por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).
Esta última patronal engloba a la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), «pero no tiene voz propia», lamentó Cañete. Al contrario, a nivel europeo sí que existe, por un lado, una patronal que representa a las grandes empresas, Business Europe (de la que forma parte de la CEOE) y otra que defiende los intereses de las pymes ante la Comisión Europea, la SME United (de la que forman parte tanto la Pimec como la Confederació de la Petita i Mitjana Empresa de Balears).
Como en Europa, el Govern también tiene en cuenta a estas dos vertientes empresariales, tanto a las pymes como a la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB). «O como en Cataluña con la Pimec y Foment del Treball Nacional para los grandes empresarios», precisó Cañete.
«Pero esta diferenciación no se da en España, por lo que no se nos tiene encuentra a la hora de legislar». «Cuando tienes en la misma organización al Corte Inglés y a la tienda pequeña de al lado, solo se escuchará al primero», advirtió. Sin voz propia en la mesa de diálogo social para negociar, las pymes han perdido colchones como el pago de ocho días de indemnización que realizaba el Fogasa para empresas menores de 25 empleados, entre otros agravios.
Contra la morosidad
Igualmente, no existían mecanismos sancionadores contra el incumplimiento en el plazo de pagos, perjudicando gravemente a las pymes, sobre todo las que prestan servicio a grandes empresas que pecan de morosidad.
Para Cañete, la solución a este agravio es que «las pymes estén también en el puesto de mando» para que se las tenga en cuenta a la hora de legislar, un objetivo que solo se logrará a través del «activismo empresarial».
«No tenemos nada en contra de las grandes empresas, ni mucho menos, pero se debe tener en cuenta que las pequeñas y los autónomos podamos crecer y ser competitivos», subrayó.