- Lunes, 07 Abril 2025
- Fecha de publicación
José Raya denuncia los problemas que crea el control del tacógrafo a las empresas del sector.
FUENTE: PERIÓDICO DE IBIZA Y FORMENTERA, 7 ABRIL 2025
Gisela Revelles
La Asociación de Transportes de la Pimeef, presidida por José Raya, negocia en estos momentos un contrato con una central de compras que, entre otros beneficios, podría traer hasta Ibiza a chóferes peruanos. Según ha explicado Raya en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, la situación del sector en la isla en lo que al personal se refiere es cada vez más dramática por lo que la alternativa de traer a conductores extranjeros cobra cada vez más peso.
«Hay que buscarles vivienda, eso sí», ha dicho Raya, «pero esta es una forma de traer talento en un momento en el que no encontramos chóferes españoles porque los jóvenes no quieren trabajar en este sector». El presidente de la asociación ha señalado que, además, trabajar con esta central de compras permitirá a las empresas de transportes de Ibiza y Formentera adquirir a precios más económicos camiones, repuestos o seguros. «No es lo mismo negociar un seguro para 3.000 camiones que hacerlo de uno en uno y no es lo mismo comprar dos ruedas que comprar 200», ha añadido, «necesitamos abaratar costes y esta central de compra es una buena manera de hacerlo. Además, podemos trabajar con ellos como asociación pero también como empresarios por nuestra cuenta».
Raya ha denunciado que en estos momentos la presión fiscal sobre el sector del transporte es «muy elevada». Las empresas compiten con los autónomos, cuya fiscalidad es más baja, y, además, con las grandes compañías. Todo esto provoca que las cuentas de resultados a final de año tengan «un margen comercial de entre un 2% y un 4%».
En lo que la falta de empleados se refiere, José Raya ha señalado que el de transportista es «un trabajo vocacional y hasta de servicio público». De ahí que resulte difícil encontrar a gente dispuesta a trabajar en el sector. «Y cuando encuentras a alguien», ha señalado, «tienes que contratarlo para que empiece a trabajar el mismo día porque, si te lo piensas, cuando le llames, ya lo habrá contratado otra empresa». La situación se agrava por la falta de vivienda, que ha obligado a muchos empresarios de todos los sectores económicos de Ibiza y Formentera a tener que proporcionar a sus trabajadores un lugar en el que residir.
En estos momentos, ha explicado también el presidente de la Asociación de Transportes de la Pimeef, el nivel de trabajo en las Pitiusas es muy elevado. Y los chóferes y las empresas se encuentran con un problema añadido: el tacógrafo. Cuando estos chóferes desembarcan en Ibiza tras cinco horas de viaje desde Valencia, eso significa que el tacógrafo registra actividad en el camión cuando este debería estar parado. Las multas, ha recordado Raya, suben hasta los 2.001 euros. «En el caso de mi empresa», ha afirmado, «el pasado pagamos más de 30.000 euros por esto».
Ante esta situación, los transportistas están recibiendo el apoyo del PP, que ha presentado varias iniciativas ante el Congreso para que el Gobierno aplique la directriz europea según la cual los vehículos de transporte están exentos del uso del tacógrafo en islas de menos de 2.300 kilómetros cuadrados. En España, esta situación solo se da en Formentera, pero en el resto de las islas de Baleares el tacógrafo es obligatorio. «La Administración saca un dineral de las empresas de transporte con esto», ha denunciado el empresario, «si la norma de la Unión Europea exime de su uso en esas islas, será por algo. Pero aquí lo regulan de otra manera y eso no puede ser».