La jornada de los Premis PIMEEF, celebrada ayer en el Centre Cultural de Jesús, ha tenido amplia repercusión en los medios locales. FOTO: PIMEEF.

FUENTE DIARIO DE IBIZA, 29 OCTUBRE 2021 (suscripción)

Homenaje a las pymes pitiusas, a sus trabajadores y a los autónomos
El acto sirve para recorrer la historia reciente de las Pitiusas a partir de sus pymes, que han contribuido de forma decisiva al desarrollo de las islas

Cristina Martín Vega - Eivissa
José Parrot llegó a la Ibiza de 1960 con su pequeño tractor para mover tierras en el nuevo aeropuerto. La isla se preparaba para recibir al turismo que la transformaría para siempre. Tras José, llegó su hermano Ángel, aún un niño, y entonces el tractor ya trabajó día y noche, sin parar, como relató ayer emocionado el hijo de José, Roger, al recoger el premio a la Trayectoria Empresarial que le otorgó la Petita i Mitjana Empresa d’Ibiza i Formentera. Después les siguieron los otros dos hermanos, Jaime y Manuel, y en 1962 fundaron la empresa Hermanos Parrot: «Sin darse cuenta, estaban colocando las primeras piedras de un proyecto empresarial de éxito», en palabras de Roger, que recordó que llegaron a una isla «totalmente rural y artesana donde estaba todo por hacer».

Aquel mismo año Juan Bufí comenzó a repartir agua potable por la isla con un camión. La empresa creció de la mano del desarrollo del turismo y el boom de la construcción que llevó aparejado, hasta convertirse en el Grupo de Empresas Juan Bufí, adaptándose a las necesidades de los nuevos tiempos. Juan Bufí, hijo del fundador, recordó ayer que en los veranos se pasaba 14 y 15 horas transportando agua con un camión; se levantaba a las siete y media y regresaba a casa a las doce o la una de la madrugada. Bufí recogió el reconocimiento a la Promoción empresarial y al asociacionismo.

Trabajo duro y compromiso
El esfuerzo, las jornadas interminables, el compromiso, el trabajo duro, la ilusión son comunes a los once premiados ayer por la Pimeef en una gala presencial que, tras un año en blanco por el covid, se volvió a celebrar en el Centro Cultural de Jesús en un ambiente muy cercano a la normalidad prepandemia, salvo por el uso de las mascarillas por parte de los más de 200 asistentes. Aunque fueron once los distinguidos, el acto fue un reconocimiento al trabajo desarrollado por las pequeñas y medianas empresas pitiusas en las últimas décadas, y también durante la crisis provocada por la pandemia, la más grave de la historia reciente, que algunas no han podido superar y que a otras ha dejado maltrechas.

El agradecimiento a los trabajadores de esas empresas, a su entrega y su compromiso, tanto a los actuales como a los que ya no están, fue ayer una constante. «Las empresas sin nuestros trabajadores no somos nada», sentenció Carlos Navarro, del restaurante Umami, premio al Joven empresario junto a su socio Mario Puerta.

Pionero fue también Carlos Tur, que abrió Muebles Carlos, en Formentera, hace 58 años, cuando usaba un carro tirado por caballos para transportar su mercancía. Ayer recibió el premio a la Empresa más destacada de Formentera, convertida ya en una de las más grandes e importantes de la isla, y en una referencia en su sector, como destacó la presidenta del Consell de Formentera, Ana Juan.

Uno de los momentos más emotivos fue cuando Marc Torres recibió la Mención especial a título póstumo para su padre, Mariano Torres, fallecido por covid el año pasado. «Quiso acercar la náutica recreativa a la gente de Ibiza. Fue hijo de un mestre d’aixa y desde los 15 años se dedicó a la náutica. Su huella y su legado siguen entre nosotros. Le echamos mucho de menos», señaló su hijo. Mariano Torres, dueño de Motonáutica Ibiza, presidió la Asociación de Náutica durante más de una década y fundó la Feria Náutica de Santa Eulària, que se celebra desde hace 27 años y es cita obligada para el sector.

«Hay que valorar el compromiso y la trayectoria de las pymes, que son la historia del desarrollo económico y social de nuestras islas. Las pymes tienen un papel fundamental para poder salir de esta crisis», declaró el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí. El recorrido por la historia reciente de las Pitiusas que fue la gala, a través de sus empresas, se detuvo en Cor Pitiús, dedicada a la construcción, que ha intervenido en destacadas obras públicas como los mercados de Ibiza y Sant Antoni o la desaladora de Formentera. También en la carnicería Can Ros, de Can Bellotera, cuya historia arranca en 1960 con un pequeño negocio y que ahora planta cara a las grandes superficies que la rodean, porque su clientela es fiel: «A veces nos llaman y nos dicen: prepárame la carne que estoy haciendo cola en... una gran superficie, no diré el nombre», contó entre risas Antonio Guasch Serra al recoger la placa.

Tradiciones y arraigo
La Pimeef también distinguió a empresas que han basado su éxito en el mantenimiento y revitalización de las tradiciones, como el Forn Can Bufí, que nació en la cocina de Josefa Ramón y que ahora tiene más de 80 trabajadores y diez tiendas repartidas por Ibiza, así como una legión de incondicionales de sus magdalenas ibicencas y otras delicias de la gastronomía local. La artesana ceramista María José Marí, de Frigolades (distinguida como Autónoma del año), sigue la senda de su padre, Antoni Frígoles, que le transmitió «la pasión por este oficio». Marí dedicó su premio a los autónomos, que con tanta dificultad y esfuerzo sacan adelante sus proyectos. Javier Escandell y Belén Tur, de Enotecum, recogieron el premio a la Difusión del conocimiento y promoción de la excelencia, por su trabajo para fomentar la cultura vinícola.

Las alusiones a la pandemia y las dificultades extremas que impuso a empresas, trabajadores y autónomos atravesaron las intervenciones. Precisamente en plena pandemia nace «uno de los proyectos más valientes e innovadores», en palabras de la gerente de la Pimeef, Maria Àngels Marí: Ibiza Botánico Biotecnológico, cuyo responsable, Eduardo Mayol, recogió el premio a la Empresa revelación. Mayol anunció que Ibiza puede ser referente «en el mundo de la biotecnología».

Rojo: «No se presenta nada fácil la actividad empresarial a corto plazo»
El presidente de Pimec denuncia la losa que supone la morosidad para las pymes españolas

El sufrimiento y las dificultades que trajo la pandemia centró la primera parte del discurso del presidente de la Pimeef, Alfonso Rojo, que tuvo palabras de agradecimiento para los trabajadores: «Gracias a los que estuvieron al pie del cañón en todo momento, por ser de actividades esenciales, y a los que tuvieron que quedarse en casa, con la terrible inseguridad de no saber qué sustento les iba a llegar, hasta que los ERTE llegaron...». También destacó el trabajo de los sanitarios y las fuerzas de seguridad, y el esfuerzo de las navieras y aerolíneas, que mantenían aviones y barcos casi vacíos para que las islas no se quedaran incomunicadas. Rojo dio las gracias a los representantes políticos por su trabajo durante la crisis del covid, pero criticó que «cuando han tenido que intervenir más de dos administraciones, todo se ha enredado».

Rojo advirtió sobre los «retos y nubarrones» que hay por delante, derivados del «incierto escenario económico mundial», con grandes carencias de materias primas y «costes disparatatados de combustibles y energía»: «No se presenta nada fácil la actividad empresarial a corto plazo». Rojo marcó como retos en la hoja de ruta en Eivissa la eficiencia energética, el cuidado del territorio y la modernización, que tanto empresas como trabajadores y Administración deben asumir, a su juicio.

El presidente de la Petita i Mitjana Empresa de Cataluña y de la Plataforma contra la Morosidad, Antoni Cañete, denunció la losa que supone para las pymes españolas la morosidad, y reclamó un régimen sancionador para garantizar que se cumplen los plazos de pago que establece la ley, 60 días (30 si es Administración).

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FUENTE: PERIÓDICO DE IBIZA Y FORMENTERA, 29 OCTUBRE 2021

Premios a la excelencia empresarial de las Pitiusas
La Pequeña y Mediana Empresa retoma la entrega de sus galardones

Sonia Ribas | Ibiza
La Pequeña y Mediana Empresa de Ibiza y Formentera (Pimeef) reconoció ayer el enorme esfuerzo realizado por el tejido empresarial pitiuso, principalmente durante la pandemia.

Aunque la situación sigue siendo complicada para muchos empresarios, la patronal quiso olvidar por unos instantes temas como la crisis y el coste de la luz y organizó su tradicional gala de entrega de premios.

Como tantos otros, el evento no pudo celebrarse el pasado año debido a la pandemia. Por ello, los miembros de la patronal, premiados y representantes políticos y de la sociedad pitiusa vivieron con más ganas, si cabe, el evento de ayer celebrado en el centro cultural de Jesús.

El presidente de la Pimeef, Alfonso Rojo, comenzó repasando los difíciles momentos vividos durante la pandemia y reconoció que, al efectuar ese repaso mental, recordaba a las personas y no el trabajo u otras acciones.

«Sólo una palabra: gracias porque me habéis hecho sentir seguro», dijo.
Rojo agradeció también la implicación de ayuntamientos, consells y Govern «y no sólo hablo de dinero». «Os hemos sentido muy cerca», insistió.

El presidente de la patronal recordó, además, temores sufridos durante el confinamiento y las dudas creadas sobre cómo podría continuarse con la actividad empresarial en las Pitiusas: «No dejábamos de pensar cómo mantener la actividad al día siguiente».

Asimismo, aprovechó para criticar la «burocracia desesperante» con la que se toparon en algunas ocasiones y lamentó el panorama «incierto» que se presenta a los empresarios de las islas. «No se presenta nada fácil», reiteró.

Rojo reclamó en su discurso más protección frente al intrusismo y más formación de calidad para los jóvenes.

«Seamos algarrobos», finalizó el presidente, realizando un símil con este árbol del que destacó su persistencia y resistencia durante épocas difíciles.

Durante la gala, el vicepresidente de Conpymes y responsable de Pimec Cataluña, Antonio Cañete, pidió que las pequeñas y medianas empresas «estén presentes en el puente de mando» de la economía balear. «Que nuestros legisladores piensen en pequeño para hacernos grandes», afirmó.

En su intervención, Cañete abordó también otras cuestiones como la morosidad.
Durante el acto se llevó a cabo además el reconocimiento al comité honorífico de la Pimeef formado por Joan Tur Ripoll, Mariano Riera y Joan Riera, entre otros.

En relación a los premios, 11 fueron entregados a distintos grupos comerciales y negocios de las Pitiusas. En la categoría de Pequeña Empresa, Cor Pitiús fue la primera entidad galardonada en una tarde repleta de emociones.

El comercio emblemático y de proximidad que se hizo con el premio de la Pimeef fue en esta ocasión la Carnicería Can Ros, mientras que Muebles Carlos fue elegido como el negocio más destacado de Formentera. Los responsables de estos dos negocios, con décadas de historia, explicaron cómo iniciaron su actividad. En el caso de Can Ros, en 1960, mientras que Muebles Carlos comenzó hace 58 años repartiendo los primeros muebles vendidos en Formentera en un carro tirado por animales. «No sé si merezco el premio, pero ya que me lo dan...», destacó el propietario Carlos Tur.

El Forn Can Bufí recibió el galardón en la categoría de Mediana empresa. En su caso, cuentan con más de 80 trabajadores y todos los días «intentamos hacerlo lo mejor posible», señaló la propietaria Josefa Ramón.

En cuanto al premio al Joven Empresario, el reconocimiento fue para Carlos Navarro y Mario Puertas del Restaurante Umami. María José Marí, con Frigolades, fue distinguida como la Mejor Autónoma del año.

Por otra parte, el premio a la Difusión del Conocimiento y Promoción de la Excelencia recayó en Enotecum, mientras que la Empresa Revelación fue Ibiza Botánico Biotecnológico, cuyo galardón fue recogido por Eduardo Mayol.

El empresario, que abrió en plena pandemia, reconoció que no esperaban «ni mucho menos» este galardón y aseguró además que estaban «muy agradecidos».
Un emocionado Javier Escandell, de Enotecum, también reconoció sentir «mucha ilusión» por el premio, «que siempre es importante».

«A nivel personal y a nivel de empresa, siempre buscas hacer algo para ser reconocido», explicó antes de la gala.

En mitad del evento, llegó uno de los momentos más emotivos con la mención especial a título póstumo para reconocer la figura de Mariano Torres de Motonáutica Ibiza. A los 65 años, falleció el invierno pasado debido al Covid-19.

Su hijo Marc fue el encargado ayer de recoger la distinción. Torres presidió durante más de diez años la Asociación Náutica de la Pimeef desde la que quiso impulsar la formación profesional en el sector. Entre otros logros, creó también hace casi tres décadas la Feria Náutica de Santa Eulària.

«Padre, mentor. Te echamos mucho en falta», destacó su hijo tras recibir el premio.
Por otro lado, el premio a la Trayectoria Empresarial recayó en la empresa Hermanos Parrot y el reconocimiento a la Promoción Empresarial y al Asociacionismo fue para el grupo empresarial Juan Bufí, quien aseguró que su negocio «llegará a los 100 años».

El presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, cerró el acto asegurando que el tejido empresarial «debe mirar hacia adelante» y destacó el carácter de Ibiza, una isla «de gente trabajadora».